¿Y si Trump buscara frenar el crecimiento de EE.UU.?

El mercado ha dado por sentado que Donald Trump mide el éxito económico a través del desempeño del S&P 500. No obstante, una nueva teoría empieza a cobrar relevancia: ¿y si en realidad su foco estuviera en la rentabilidad del bono del Tesoro a 10 años?

Las recientes declaraciones del secretario del Tesoro, Scott Bessent, respaldan esta hipótesis.

La administración parece centrada en reducir los rendimientos de los bonos a largo plazo, y la forma más efectiva de conseguirlo es generando incertidumbre y moderando el crecimiento.

A través de medidas como aranceles, recortes drásticos en el gasto público y mensajes ambiguos sobre la economía, Trump podría estar buscando debilitar el dólar, reducir el déficit de cuenta corriente y fomentar la reindustrialización, aunque esto implique una desaceleración económica controlada.

Los mercados ya están reaccionando. Los inversores en bonos han cerrado muchas posiciones cortas, las expectativas de recortes de tasas por parte de la Fed han aumentado y el mercado de opciones refleja una caída en los rendimientos. Si esta estrategia está en marcha, el S&P 500 y los mercados de crédito podrían enfrentar ajustes en los próximos meses.

La gran incógnita es cuánto tiempo podrá sostenerse esta táctica antes de que la desaceleración se convierta en un problema político. Con las elecciones de mitad de mandato de 2026 acercándose, la administración necesitará revertir cualquier impacto negativo antes de que el costo electoral sea demasiado alto.

Si la estrategia consiste en ralentizar el crecimiento ahora para impulsar una recuperación más adelante y llegar a 2026 con una economía en plena forma, entonces las previsiones de los analistas para 2025 podrían estar equivocadas.

En consecuencia, podríamos estar entrando en un período de alta volatilidad en los mercados.