La retirada de Ryanair de aeropuertos regionales en España vuelve a dejar al descubierto la dependencia que estos tienen de la aerolínea irlandesa. La compañía, que ya redujo de forma significativa su oferta en Jerez, Valladolid o Vigo, amenaza ahora con recortar otro millón de asientos en el próximo invierno si Aena no reconsidera su plan de elevar las tasas aeroportuarias un 6,5% en 2026.
Durante 2025, la aerolínea ha cancelado unas 800.000 plazas en rutas regionales, redirigiendo la oferta hacia grandes ciudades como Madrid, Málaga o Alicante, donde su capacidad aumentó un 3% en verano. Según datos de Aena, la reducción ha golpeado especialmente a Valladolid (-59,5% de pasajeros hasta julio) y Santiago (-13,3%), mientras que aeropuertos como Vigo (+10,2%) o Zaragoza (+2,9%) han logrado compensar parcialmente la pérdida. La competencia, sin embargo, no ha logrado cubrir el vacío. Vueling apenas retomará la conexión Barcelona-Valladolid en octubre, mientras que Volotea y Air Nostrum no han asumido de momento rutas canceladas. La británica Jet2.com sí ha anunciado que operará Jerez-Londres a partir de 2026.
Entre las rutas canceladas en aeropuertos medianos españoles se encuentran las siguientes:
Jerez - Barcelona
Jerez - Santiago de Compostela
Valladolid - Santiago de Compostela
Valladolid - Barcelona
Valladolid - Londres Stansted
Vigo - Barcelona
Zaragoza - Viena
Zaragoza - Lisboa
Asturias - Londres Stansted
Santander - Alicante
Análisis fundamentalLos resultados confirman que Ryanair sigue sólida en España pese a su repliegue regional. En el primer semestre de 2025 transportó 32,64 millones de pasajeros, dos millones más que en el mismo periodo del año anterior, consolidando su liderazgo como primera aerolínea en el mercado español. Su estrategia apunta a maximizar la rentabilidad en hubs de gran volumen, trasladando capacidad desde rutas menos eficientes. El conflicto con Aena es clave: la aerolínea denuncia que el modelo de red y el incremento de tasas encarecen su operativa frente a otros mercados europeos. Si no se revisan, el ajuste podría ampliarse a más aeropuertos medianos, lo que amenaza la conectividad regional en España.
Análisis técnicoLas acciones de Ryanair mantienen en 2025 un sesgo alcista de fondo, apoyadas en la recuperación del tráfico aéreo y en su sólida generación de caja. El valor rompió a finales de julio el rango de consolidación entre €21,98 y €24,82, alcanzando un máximo anual en €27,01. Sin embargo, tras ese impulso, corrigió con fuerza hasta los €25,12, nivel donde ha vuelto a encontrar apoyo.
Por proyecciones, el objetivo de TradingPRO sube hasta los 75 euros.
Impacto del sentimiento de mercado ( Aumento del Risk-off):
El sector aéreo, por su carácter cíclico, es especialmente sensible a cambios en el apetito por el riesgo de los inversores. En un entorno risk-off, marcado por tensiones geopolíticas, ralentización económica o encarecimiento del crudo, las aerolíneas suelen registrar ventas en bolsa, mientras los capitales migran hacia activos refugio como bonos del Tesoro, el franco suizo o el oro.
Aunque Ryanair cuenta con la ventaja competitiva de su modelo de bajo coste y un posicionamiento líder en España, sigue expuesta a la volatilidad macroeconómica y a posibles caídas de la demanda en escenarios de aversión al riesgo. Esta dualidad convierte a la compañía en un valor atractivo en fases risk-on, pero vulnerable en momentos de incertidumbre global. El repliegue regional de Ryanair es más una maniobra estratégica que un retroceso estructural. La compañía refuerza su presencia en grandes aeropuertos y mantiene un sólido crecimiento en pasajeros.
La presión sobre Aena y la subida de tasas marcarán el pulso de los próximos meses, mientras que en bolsa el valor se mantiene en un rango clave, con los inversores atentos al desenlace del pulso con la gestora aeroportuaria española.